Hablo y ya no respondes como antes, cuando uno expresa lo que siente, lo convierte en un miserable; me quedo suspendidos por hilos, mañana puede cambiar todo, pero mi espíritu pesimista quiere seguir; este año hice una resolución de ya no serlo, se torna difícil, pero no imposible, quizás sé que no va a pasar entonces no quiero ilusionarme con eso, mi teléfono ya no suena, no he sido lo mejor, sólo soy el resultado de una serie de eventos concatenados a favor del saber, he conocido, he experimentado, la música sólo expresa lo que siento, y ahora suena triste, confundida, sin esperanzas de seguir, pero quiere estar allí, leyendo el siguiente capítulo.
¿Quieres jugar? Ya no conozco las reglas de seducción, nunca me interesaron las relaciones humanas, por naturaleza siempre fui solo, importa eso, importan tus problemas para ser feliz, alguien puede ayudar, no sé si yo pueda serlo, pero me alegraría de que lo superes, no se debe uno negar la felicidad, cuando ésta está en frente tuyo, puedo liberar mis ideas por horas, pero tu tomas decisiones que me afectan, es difícil decir que estoy bien y ocultarlo, mi rostro siempre fue bueno para eso, mi voz no.
Ayer caminé, prendí un cigarrillo, hace tiempo no fumaba, pensé en comprar alguna bebida para acompañar la noche, pero recordé mis malas épocas, cuando nada se resolvía con un mucho licor, fue inevitable no verlo, el dolor estaba allí, siempre ha estado allí, me acostumbre a vivir con él, ya no me sorprende, ahora tomo todo de otra forma, pero de la misma manera.
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